Letras viejas IV



entre dientes
aceptan jugar a quien no miente.
Se lima  una manzana
 por el costado que más gusta.
 y así, prefieren jugar sin las fichas,
y esperar la mano  
¿Es mío el ancho? ¿o falta ensueño?
va cayendo de a poco el telón
y llueve
el beso mas dulce y el mas despiadado, 
es justamente el del final.
Quizás algo termina,
cuando crees que va a empezar

dg (1998)

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